¿Qué es el Ringer-Lactato?
Es un cristaloide isotónico y una solución de remplazo alcalinizante, que posee
una osmolaridad similar al plasma, muy efectivo para reponer las pérdidas de
líquido en el compartimento intersticial en casos de deshidratación.
¿Cuáles son sus indicaciones?
Cuando un paciente necesita la rápida administración de fluidoterapia al entrar en nuestra consulta, y no conocemos demasiados datos sobre la historia clínica o analítica laboratorial de dicho animal, seleccionamos siempre un cristaloide isotónico para corregir inicialmente los estados de deshidratación asociados a la patología a tratar.
Dado su poder alcalinizante podremos corregir la acidosis metabólica y
desequilibrios electrolíticos debidos a diversas patologías como pueden ser:
- Vómitos (excepto los vómitos puros, por obstrucción pilórica, ya que provocan alcalosis por pérdida de ácido clorhídrico).
- Diarreas (suplementado con K+ y NaHCO3 en el caso de ser muy profusas)
- Dilatación-Torsión Gástrica.
- Insuficiencia renal no oligúrica.
- Shock
- Mantenimiento
¿Existe alguna limitación en su uso?
El lactato se metaboliza en el hígado. Es por ello que los fluidos con éste componente no están indicados en pacientes con insuficiencia hepática severa.
Además, está contraindicado en pacientes con hipercalcemia, ya que contiene
calcio.
Por este mismo motivo, nunca debe administrarse en la misma vía que una
transfusión sanguínea, pues el calcio podría provocar la coagulación de la sangre
al interaccionar con el anticoagulante utilizado en el sistema de transfusión.
Además, tampoco hemos de administrarlo con bicarbonato sódico u otras soluciones
que contengan carbonatos, ya que las sales de carbonato cálcico precipitarán en
el propio sistema de infusión en forma de cristales.
El Ringer-Lactato está contraindicado también en situaciones de
hiperpotasemia y alcalosis metabólica severa.
Finalmente, se desaconseja el uso en caso de situaciones como hipovolemia o shock hipovolémico sin monitorizar al paciente de manera constante, pues la rapidez con la que se extravasa puede ser peligrosa en caso de infundir grandes volúmenes de dicha solución, ya que cabe el riesgo de producirse un edema y la repetición de bolos puede producir hemodilución excesiva.