¿Qué es el golpe de calor?
El golpe de calor se caracteriza por una disfunción del
sistema nervioso central e hipertermia que se produce cuando los mecanismos que
disipan el calor están patológicamente afectados o cuando son incapaces de
mantener la homeostasis termorreguladora en aquellos pacientes que han sufrido
de una exposición a temperaturas extremas y/o ejercicio extenuante.
¿Cuál es su patofisiología?
La patogenia de este proceso, consiste en que al aumentar la temperatura
por encima del umbral tolerable, el jadeo se vuelve ineficaz y la evaporación
que se produce en los cornetes nasales y almohadillas plantares es
insuficiente.
¿Qué animales presentan una mayor incidencia?
Los animales que con mayor frecuencia sufren ésta situación
clínica son pacientes obesos, de razas grandes o de pelo largo y tupido,
siendo la incidencia mayor en los de pelaje oscuro.
Entre aquellos que sufren predisposición racial, los perros
braquicéfalos están más dispuestos, pues el flujo respiratorio está alterado
debido a la conformación característica de su cráneo, llevando en muchas
ocasiones a la alteración de la fisiología del flujo respiratorio (de laminar a turbulento), lo que los
predispone a una peor evaporación del calor y a padecer un edema laringeo
secundario al estrés térmico.
¿Qué síntomas presentará el animal cuando acude a consulta?
Generalmente, los animales llegan a consulta con
sintomatología neurológica variable, generalmente por el daño encefálico debido
al estrés térmico, deshidratación severa, disminución de la perfusión y shock.
Es por todo ello que deberemos centrar nuestras
actuaciones primarias en mantener la funcionalidad renal y prevenir las lesiones
cerebrales y la aparición de anomalías en la coagulación (especialmente
trombocitopenia, daño vascular, CID, d-dímeros, disminución del plasminógeno y
aumento de los tiempos TP y TTPA).
Las anomalías a destacar en la bioquímica son:
- Hipoglucemia: el descenso de los niveles de glucosa en
sangre agrava los signos neurológicos producidos por la hipertermia por estrés.
Esta condición se produce ante el aumento de demanda de glucosa ante un cuadro de convulsiones, distress respiratorio, sepsis, insuficiencia hepática y alta
temperatura corporal.
- Incremento de la concentración de enzimas hepáticas (ALT,
AST, fosfatasa alcalina) principalmente debido a la hipoperfusión, convulsiones
o daño muscular debido al calor.
- Elevación de la urea y creatinina (azoemia) debida a
mecanismos prerrenales, renales (entre los que destaca la necrosis renal) y
hemoconcentrativos con la consecuente mioglobinuria, debido al daño muscular lo
que suele traducirse en un fallo renal agudo.
Finalmente en el electrocardiograma se observan
anormalidades debidas al daño cardíaco, la hipoperfusión o la trombosis.
¿Qué puedo hacer para abordar un paciente con un golpe de
calor?
En estos casos, la estabilización del paciente es primordial y tiene como fin
disminuir la temperatura del animal y conseguir que el paciente active los
mecanismos de termorregulación así como restablecer la homeostasis neurológica,
hemodinámica y respiratoria.
Para ello.
1. Aseguraremos una vía aérea permeable (A: Airway; B: Breathing) y
administraremos oxígeno a un flujo de 3 -5 litros/minuto (mediante mascarilla
de oxígeno o tubo endotraqueal, previa inducción anestésica).
2. Realizaremos una venopunción y canalización de dos vías permeables:
- Una de ellas para administrar cristaloides isotónicos a
temperatura ambiente como el glucosalino al 5% a 50 ml/kg/h, la primera hora.
- Otra de ellas para evaluar la necesidad de administración y dosificación relativa de coloides
Los cristaloides fríos reducen la capacidad para disipar el
calor, por lo que no debería utilizarse suero frío para tratar un golpe de
calor.
3. Intentaremos restablecer la temperatura corporal, mediante baños con
agua fresca.
Nunca realizaremos estos baños con agua muy fría o hielo por
la misma razón que con la fluidoterapia. La vasoconstricción periférica reduce
la capacidad para disipar calor.
Éste proceso finalizará cuando el animal alcance una
temperatura menor de 40ºC a fin de no producir hipotermia iatrogénica.
Posteriormente procederemos al enfriamiento evaporativo
mediante ventiladores de manera lenta y sostenida.
¿Empleas corticoides en la terapia inicial?
Algunos autores los aconsejan mientras que otros no son partidarios.
Mi experiencia personal, es que si hay un cuadro
inflamatorio que agrave todo el proceso o un shock derivado de este, está justificado su uso (metilprednisona de 1 a 20 mg/Kg IV)
¿Y luego que hago?
Las alteraciones en la cascada de la coagulación y la insuficiencia renal son
las complicaciones más frecuentes en caso de golpe de calor.
En estos casos se produce un fallo multiorgánico a
consecuencia de un proceso inflamatorio sistémico.
La deshidratación de los animales y el descenso drástico del
gasto cardiaco hacen que se produzca anoxia o hipoxia tisular ante el descenso
de la perfusión tisular (es por ello que es muy útil medir las concentraciones
de lactato).
El aumento drástico de la temperatura dara lugar a daños tempranos
en la mucosa gastrointestinal provocando diarreas hemorrágicas y úlceras.
En aquellos casos en los que midamos la creatinin-kinasa
veremos un aumento significativo bien sea por las convulsiones o por el daño
muscular producido a consecuencia de la hipertermia (coagulación de proteínas
musculares).
¿Qué protocolo puedo utilizar en el control a largo plazo de un animal con golpe de calor?
El protocolo que utilizamos en el control a largo plazo del animal con golpe de
calor consiste en:
- Vigilar la glucemia cada 2 horas: administrar bolo de suero glucosado a demanda
y utilización de fluidoterapia de mantenimiento con parte de glucosa.
- Equilibrio ácido-base: suplementación de potasio en
fluidoterapia.
- Administración de plasma fresco congelado para el control de
la hipoalbuminemia y déficit en los factores de coagulación: 20 ml/Kg
- Control de lesiones y ulceraciones gástricas: antagonistas H2:
ranitidina (2 mg/kg/BID o TID vía IV lenta).
- Antibioterapia: cefazolina (22 mg/kg/BID vía IV lenta) combinada
con metronidazol (10 mg/kg/BID vía IV).
- Promoción de la diuresis: furosemida (1-4 mg/kg/TID inicialmente IV).
- Control de arritmias: Un único bolo de lidocaína, previa medición del potasio (2-4 mg/kg IV) y a continuación CRI de lidocaína (50-80 µg/kg/min
IV) para el control de arritmias y de la liberación de radicales libres.
- Prevención del CID: heparina de bajo peso molecular (100 UI/kg/24h, primera
dosis; 50 UI/kg siguientes).
¿Qué pronóstico puedo dar al propietario?
El pronóstico depende del binomio tiempo-temperatura.
Ello quiere decir que cuanto mayor tiempo haya pasado
el animal en ésta situación o mayor haya sido la temperatura el pronóstico será
peor.
Las principales situaciones que marcan la tendencia o
pronóstico ante el golpe de calor son la hipoglucemia persistente,
trombocitopenia, hipoalbuminemia o los valores elevados de creatinina.
En caso de superar el animal éste estatus, hemos de informar
al propietario de que las altas temperaturas pueden alterar el centro
termorregulador quedando el animal predispuesto a sufrir de nuevo esta
situación en caso de temperatura extrema.
La patogenia de este proceso, consiste en que al aumentar la temperatura por encima del umbral tolerable, el jadeo se vuelve ineficaz y la evaporación que se produce en los cornetes nasales y almohadillas plantares es insuficiente.
En estos casos, la estabilización del paciente es primordial y tiene como fin disminuir la temperatura del animal y conseguir que el paciente active los mecanismos de termorregulación así como restablecer la homeostasis neurológica, hemodinámica y respiratoria.
1. Aseguraremos una vía aérea permeable (A: Airway; B: Breathing) y administraremos oxígeno a un flujo de 3 -5 litros/minuto (mediante mascarilla de oxígeno o tubo endotraqueal, previa inducción anestésica).
2. Realizaremos una venopunción y canalización de dos vías permeables:
3. Intentaremos restablecer la temperatura corporal, mediante baños con agua fresca.
¿Y luego que hago?
Las alteraciones en la cascada de la coagulación y la insuficiencia renal son las complicaciones más frecuentes en caso de golpe de calor.
El protocolo que utilizamos en el control a largo plazo del animal con golpe de calor consiste en:
Buenas tardes.
ResponderEliminarComo compañero de dos perretes a mi cargo (o más), echo en falta que nos explique que debemos hacer ante un golpe de calor mientras llegamos a la clínica veterinaria donde vaya a ser tratado